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Las miniguías de Albert. Polinesia Francesa, viaje al paraiso (I)
18 de Mayo de 2020

Publicado por Albert en Oceanía , trackback

Para muchos viajeros ir a la Polinesia Francesa es uno de los destinos míticos de los denominados “especiales” y francamente lo es a pesar del número de horas de vuelo y escalas que hay que realizar desde España. 

                              100.jpg  © 2018 Albert Ferré

Hay mil razones para viajar a la Polinesia Francesa , cada viajero tendrá las suyas. 

Es fundamental para planificar bien el viaje tener claro lo que uno quiere hacer y descubrir de este paraíso en medio del Océano Pacífico.

En todos los lugares eres bienvenido “maeva en tahitiano” con el collar Lei o con una flor de Tiaré (Gardenia tahitensis) detrás la oreja izquierda o con coronas de flores tropicales. Los tatuajes “tatau” representan la esencia del significado de la vida para los tahitianos, el arte de tatuar se lleva practicando en estas islas desde hace siglos. Los símbolos tienen el significado de contar la historia personal de cada individuo.

5.jpg   101.jpg © 2018 Albert Ferré                      

La Polinesia Francesa está compuesta por cinco grupos de islas; las de la Sociedad; las Tuamotu; las Australes; las Gambier; y las Marquesas. Cada grupo de islas tiene su interés: 

Sociedad – Mencionar el nombre de alguna de las 9 islas habitadas que lo componen evoca sensaciones de un paraíso idílico: Tahití; Bora Bora; Moorea; Huahine; Raiatea; Taha’a; Tupai; Maupiti y Tetiaroa. Son las más visitadas por su cercanía con Tahití, sus playas de arena blanca dejan paso a las aguas de azul intenso donde peces tropicales llenos de colorido se mueven por los jardines de coral y gigantescas mantarrayas nadan con elegancia. También son las que tienen las mejores infraestructuras para el turismo.

Tuamotu – Compuesta por 76 islas y atolones, las principales islas son: Rangiroa; Tikehau; Manihi y Fakarava y todas ellas destacan por sus atolones, una vida submarina espectacular y el cultivo de las perlas negras.

Gambier (Mangareva) – Las más alejadas y menos visitadas por los turistas, situadas al sur este de Tahití a unos 1.600km y a más de 4h de avión. Una laguna contiene las totalidad de las islas del archipiélago. 

Australes - Están situadas al sur de Tahití, a 600km de la capital. Está formado por siete islas, de las cuales cinco están habitadas de las cuales cuatro son accesibles en avión (Rurutau; Tubuai; Raivavae; Rimatara). 

Marquesas – “la tierra de los hombres” islas verdes y picos vertiginosos surgen del Océano Pacífico, tierras de historia y de leyendas tan fascinantes como inolvidables. Las Marquesas están situadas 1.500km al noreste de Tahití (3h30 de avión) y agrupan 12 islas, de las cuales sólo seis están habitadas por aproximadamente unas 9.300 personas. Las islas principales son: Nuku Hiva; Hiva Oa; Ua Pou y Ua Huka, estas cuatro están conectadas por avión, y Tahuata y Fatu Hiva a las que solamente se puede acceder en barco. 

Hay varias compañías aéreas desde Europa, Air France o Air Tahiti Nui tienen vuelos a Papeete (isla de Tahiti) con escala en Los Ángeles. También se puede volar con Latam desde Santiago de Chile con escala en la Isla de Pascua o desde Los Ángeles o San Francisco con las compañías Delta, Air New Zealand o American Airlines. Es importante tener en cuenta que en todos los vuelos con escala en los EEUU hay que obtener previamente el ESTA además de disponer un margen de tiempo entre uno y otro vuelo de al menos tres horas para los trámites aduaneros que son siempre lentos. 

Para los viajeros que dispongan de pasaporte de la UE los trámites a la llegada al Aeropuerto Internacional de Faa’a (Tahití) son rápidos y sencillos, solamente tendremos que presentar el pasaporte. Con independencia de la hora de llegada un grupo folclórico amenizará la espera, para entrar en ambiente. 

Hay gran variedad de alojamientos, además de los lujosos resorts en las islas más turísticas a precios prohibitivos hay alojamientos para todos los bolsillos, recomiendo las pensiones o casas de huéspedes que además de tener precios asequibles puedes compartir experiencias con la población local. Es lo que hicimos nosotros y francamente no tiene nada que envidiar de las otras opciones mucho más lujosas. 

Para los desplazamientos entre islas en avión la compañía que opera es Air Tahiti con turbohélice  ATR, disponen de packs para trayectos multi islas a precios algo reducidos. No son muy puntuales y hay que vigilar los cambios de horario sin aviso previo. Para los que viajan con mucho equipaje ver las restricciones, así mismo es imprescindible hacer las reservas con mucha antelación. 

                103.jpg   © 2018 Albert Ferré    

Además de los cruceros hay algunas compañías marítimas que hacen rutas entre islas, el más famoso es el Aranui 5 un barco de carga y de pasaje que hace el trayecto desde Tahiti a las islas Marquesas pasando por Bora Bora y por islas del archipiélago de Tuamotu en 14 días, es una experiencia única aunque el precio es elevado, como casi todo en la Polinesia. 

En Polinesia es verano todo el año, sin embargo, se diferencian dos grandes estaciones, la seca y la húmeda. La primera va de marzo a noviembre con unas temperaturas que oscilan de 21 a 27°C; la segunda, de diciembre a finales de febrero, es un poco más cálida (entre 25 y 35°C), pero está sujeta a chaparrones tropicales de corta duración.

La moneda es el Franco CFP aunque en algunos lugares aceptan los euros, 1 euro = 119 CFP. En las islas más remotas no aceptan tarjetas de crédito pero puedes sacar dinero en los cajeros automáticos (no hay muchos). No es un viaje económico aunque si te planificas bien puedes pasar 15 días gastando mucho menos que los que prefieren estar una semana en un resort. 

La comida es excelente con productos locales muy frescos, el pescado crudo (poisson cru) maridado con agua de mar o lima con leche de coco y vegetales, es una delicia. Entre los pescados está el mahi y el atún que se pueden tomar a la parrilla con arroz y verduras, también hay camarones de rio (chevrettes), y el cerdo, el pollo y la cabra (Marquesas) entre las carnes. Hay gran variedad de tubérculos como el taro, la fruta del árbol del pan y la cassava (tapioca de yuca) se utilizan también en numerosos platos. 

Todo tipo de frutas tropicales se pueden degustar, plátano, papaya, mango, pomelo (pamplemousse), etc. La cerveza Hinano es buena y si está fresquita se agradece un montón. 

La Polinesia Francesa tiene una extensión como la de Europa, con sus 118 islas y atolones de las cuales solamente 67 están habitadas. Solamente las habitan aproximadamente unas 260.000 personas de las cuales más de la mitad viven en la isla de Tahití, es uno de los territorios de ultramar de la República Francesa.

Continuará… 

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