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Las miniguías de Albert. Israel y Palestina (Cisjordania), tan cercanos pero tan distantes [III]
3 de Noviembre de 2014

Publicado por Albert en Asia , trackback

 … Viene de Israel y Palestina (Cisjordania) Tan cercanos pero tan distantes [II] 

Ramalha (Cisjordania)

La capital de Cisjordania está situada únicamente a 10 km al norte de Jerusalén. Se puede ir en taxi o bus pero preferimos contratar a un guía local para poder visitar esta zona de Cisjordania con cierta tranquilidad y por alguien local.

Hay poco a ver pero recomiendo esta escapada para poder palpar la vida en este lugar del mundo. El centro neurálgico de Ramalha es la bulliciosa plaza Al-Manara, numerosas cafeterías, joyerías, farmacias, tiendas de alimentación y un pequeño mercado se encuentran en las calles adyacentes. La bandera Palestina ondea en todos los rincones y su gente es muy amable.

La Iglesia de los Cruzados se construyó donde María y José perdieron a su hijo de camino a Jerusalén. Otro de los lugares a visitar es la Muqata’a, totalmente renovado, es la sede de la Autoridad Nacional Palestina, fue el complejo residencial de Yasser Arafat y donde pasó los últimos años tras la invasión israelí de Ramalha durante la segunda intifada (2002). Se puede visitar la tumba de Arafat que siempre está custodiada por soldados palestinos vestidos de gala y adornada de flores.

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© 2013 Albert Ferré                                                                               © 2013 Albert Ferré

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© 2013 Albert Ferré                      

El casco antiguo de Ramalha Al-Kamandjati destaca por sus edificaciones de arquitectura otomana.

En los alrededores hay el pueblo cristiano de Taybeh famoso por su cerveza, mencionado ya en la Biblia.

Nablús (Cisjordania)

Nuestra ruta se dirigió por el interior de Cisjordania hacia Nablús situada al norte en un exuberante valle entre los montes Ebal (940 metros) y el Gerizim (881 metros). Durante el viaje pudimos ver numerosos asentamientos judíos, la mayoría en la parte superior de los valles y que utilizan los recursos híbridos de la zona, pero el gran problema es que fragmentan el territorio de Palestina.

Los judíos la siguen llamando Samaria, ha sido históricamente un centro exportador de aceite de oliva y jabón. Algunos de los asentamientos judíos de la línea más extremista, a veces contra su propio ejército, están situados en las colinas de esta zona.

Lo más relevante para visitar en Nablus es la Al-Qasaba, casco antiguo o casba, a la entrada encontramos la torre del reloj. Es un auténtico laberinto de callejuelas de la etapa otomana repletas de tiendas y puestos con especies, verduras, dulces, aves, etc. Entre el gentío de esta zona podremos contemplar numerosas edificaciones otomanas, algunas en bastante mal estado y varias mezquitas, entre la que destaca la gran mezquita de Al-Kebir.

Otro lugar a visitar es una fabrica de jabones y espumas de aceite de oliva, es una de las tradiciones de Nablús con más 800 años de antigüedad. La Mofthen Factory se puede visitar. Si queremos ver un hammam el Al Hana situado en pleno zoco es recomendable. 

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© 2013 Albert Ferré                                    © 2013 Albert Ferré

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© 2013 Albert Ferré                                    

El Pozo de Jacob, para los cristianos es el lugar dónde una samaritana ofreció agua a Jesús y este le reveló que era el Mesías. Está situado junto a la entrada del mayor campamento de refugiados de Cisjordania el de Balata. La iglesia actual fue construida en 1860.

En todo este recorrido por Cisjordania nunca se nos solicitó la documentación por parte del ejército israelí, y en todo momento la gente fue muy amable y hospitalaria, parecía que no pasaba nada… muy al contrario de la realidad.

Jerusalén

La ciudad mítica, una de las ciudades que cualquier viajero quiere visitar al menos una vez en su vida.

Os puedo asegurar que no os decepcionará a pesar de los miles de turistas o las numerosas tiendas de recuerdos. Tanto la ciudad antigua como la moderna tienen un gran encanto y sobre todo historia, hay que dedicarle al menos tres o cuatro días.

Es casi innumerable las cosas que hay que visitar, seguramente me dejaré muchas, pero mi recomendación es “dejarse perder” por las calles y callejuelas con toda seguridad se encontraran lugares y experiencias que en ninguna guía de viajes se citan.

Iniciaremos nuestra ruta en el Monte de los Olivos, desde esta atalaya se divisa una excelente panorámica de la Ciudad Vieja. En su ladera hay numerosas iglesias, destaca por su belleza la Iglesia rusa de María Magdalena por sus cúpulas doradas, la capilla de la Ascensión, la Tumba de la Virgen María, la Iglesia de Todas las Naciones, o la Iglesia del Pater Noster son algunas. 

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© 2013 Albert Ferré                                       

Otros lugares interesantes son el huerto de Getsemaní y el cementerio judío.

Accederemos a la Ciudad Vieja a través de la Puerta de Herodes, por la calle Ha Prakhim llegaremos a la primera estación de la Vía Dolorosa (interior de la madraza Al-Omariyed), desde este punto hay que seguir las diferentes estaciones, la décima estación se encuentra en la Iglesia del Santo Sepulcro, las restantes cinco estaciones se encuentran en su interior. Gran parte de la Vía Dolorosa transcurre por el barrio musulmán (zona Puerta de Damasco), hay mucha animación y numerosas tiendas (zoco), en la parte final del recorrido entramos en el barrio cristiano.

Por toda esta parte de Ciudad Viaje hay galerias de arte que se parecen más a un museo que a una tienda de antigüedades. Recomendable la Aweidah Gallery (Via Dolorosa).

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© 2013 Albert Ferré                                                             © 2013 Albert Ferré

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La Iglesia del Santo Sepulcro es el lugar más sagrado del cristianismo, se dice que es el lugar dónde crucificaron y resucitó Jesús, su construcción se inició el año 326 d.C.

Es recomendable visitarla por la tarde pues habitualmente hay menos gente. Cada rincón de la iglesia está gestionado milímetro a milímetro entre las diferentes congregaciones de clérigos. Hay mucho por ver y descubrir: la capilla dónde Jesús fue clavado en la cruz; la capilla ortodoxa griega de la crucifixión; la piedra de la unción; el Santo Sepulcro; la capilla copta; la Iglesia de Santa Elena; la capilla de Adán; el coro griego; etc. 

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© 2013 Albert Ferré                                                            © 2013 Albert Ferré

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© 2013 Albert Ferré                                                       © 2013 Albert Ferré

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© 2013 Albert Ferré                 

En la esquina noroeste de la Iglesia del Santo Sepulcro hay que visitar el interesante Monasterio etíope.

Saldremos de la Ciudad Vieja por la Puerta de Jaffa para adentrarnos en el centro de la ciudad “moderna” por la calle Jaffa (podemos tomar el tranvía, durante el Sabbat el servicio está interrumpido). Un buen lugar para cenar es el restaurante Zuni en la calle Yoel Solomon o en los numerosos restaurantes que están alrededor del mercado Mahane Yehuda, lugar muy recomendado para visitar por la gran cantidad de productos que se venden y la animación en especial los jueves y viernes antes del Sabbat. 

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© 2013 Albert Ferré                                                                                 © 2013 Albert Ferré

El siguiente día lo iniciaremos a primera hora, visitaremos el Muro de las Lamentaciones el lugar más sagrado para los judíos. Para acceder hay que pasar rigurosos controles de seguridad.

El recinto impresiona por su grandiosidad y por la fuerza espiritual que transmite. Está divido en dos partes, una para los hombres y otra más pequeña para las mujeres.

Para acceder se debe vestir con recato y los hombres deben ponerse la kipá para cubrirse la cabeza, si no se dispone de una hay de gratuitas.

La zona más cercana al muro es como una enorme sinagoga al aire libre en la que cientos de hombres judíos vestidos de negro se balancean sobre sus talones, inclinan la cabeza para rezar y de vez en cuando se abrazan y besan el muro. Los viernes a la puesta del sol es el momento cumbre, se reúnen miles de personas cantando y bailando para celebrar el Sabbat, no hay que perdérselo, recordad que no se pueden hacer fotos.

Las oraciones y peticiones son introducidas en las grietas que hay en el muro, en el lado izquierdo de la zona de los hombres hay un pasaje, muy recomendable para visitar. 

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© 2013 Albert Ferré                                                                                 © 2013 Albert Ferré

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© 2013 Albert Ferré                                                           © 2013 Albert Ferré

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© 2013 Albert Ferré                                       

Reconozco que ha sido el único lugar del mundo que he tenido oportunidad de visitar, junto con el Templo de Luxor en Egipto, que me recorrió por todo el cuerpo una sensación de emoción que no puedo describir.

Saliendo por la parte derecha tenemos el acceso al Monte del Templo o Explanada de las Mezquitas, es el único para los no musulmanes.

El acceso puede estar cerrado, hay que informarse para saber cuando el ejército judío permite el acceso durante nuestra estancia. El acceso se realiza por una pasarela de madera controlada por militares israelíes.

Entramos por la Puerta de los Moros, en la gran explanada hay varias edificaciones de estilo mameluco, lo primero que nos encontramos es la Mezquita de Al-Aqsa.

Pero el edificio más destacado es la Cúpula de la Roca (Qubbet al-Sakhara), recubierto de azulejos mayoritariamente de color azul y la cúpula bañada en oro, símbolo de la ciudad. Los no musulmanes no pueden acceder, en su interior hay una gran losa de piedra sagrada tanto para la fe musulmana como la judía, para estos últimos es dónde Abraham iba a sacrificar a su hijo Isaac por orden de Yahveh. 

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© 2013 Albert Ferré                                          © 2013 Albert Ferré

Según la tradición islámica es dónde el profeta Mahoma ascendió al cielo (miraj). El actual edificio se construyó entre el 688 y 691 d.C.

Es sorprendente y hace pensar que dos de los lugares más importantes para la religión musulmana y judía estén tan sólo separados por escasos metros.

Después de estas dos interesantes visitas nos podemos tomar un respiro por el tranquilo y renovado barrio judío. Esta zona fue destruida por los jordanos en 1948 y hasta 1967 los israelíes no la volvieron a retomar con motivo de la Guerra de los 6 días.

Desde la calle David accederemos al Cardo Maximus, luego podemos acercarnos a la tranquila plaza Hurva y a la sinagoga del mismo nombre. La Sinagoga Ben Zakai es de las recomendables para visitar, otro de los lugares destacados del barrio judío es la Casa Quemada en la actualidad un museo interesante sobre la historia de la ciudad.

En el barrio armenio hay que visitar la Catedral de Santiago del siglo XI, lugar dónde fue decapitado el discípulo (solamente esta abierta durante los servicios religiosos). La Capilla de San Marcos es otro lugar interesante.

Desde este punto saldremos de la Ciudad Vieja por la Puerta de Sión, nuestro siguiente destino será el Monte Sión. En el cementerio, que está al otro lado de la carretera, podemos ver la tumba de Oskar Schindler (empresario austriaco en la que se basa la película “La Lista de Schindler”).

El Cenáculo (sala de la última cena) es el lugar en el que los discípulos se reunieron con Jesús. Por una escalera accederemos a la modesta Tumba del Rey David.

Nuestra ruta termina en la Iglesia de la Dormición lugar dónde se cree murió la Virgen María, la cripta es muy bella.

Sugiero visitar el Museo de Israel donde se encuentran los Manuscritos del Mar Muerto y una gran maqueta de la ciudad en la época del Templo, y sobre todo el impresionante Museo del Holocausto (Yad Vashem) en que se recuerda a los seis millones de judíos que murieron a manos de los nazis. 

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© 2013 Albert Ferré                                                                                  © 2013 Albert Ferré

Fuera de la ciudad se debe visitar el pueblo de Ein Kerem con las Iglesias de San Juan Bautista y la de la Visitación.

Además de todos los lugares sugeridos hasta ahora propongo estos otros que cada uno puede elegir según sus preferencias y disponibilidad de tiempo. Hay que reservar con antelación pero es muy interesante hacer el circuito de los túneles del Muro de las Lamentaciones. El Parque Arqueológico de Jerusalén & Centro Davidson, la Ciudad de David, la Torre de David, o el Paseo por las Murallas son otros lugares a visitar.

La última sugerencia es visitar el barrio ultra ortodoxo judío (Jaredí) de Mea She’arim. No se deben tomar fotos hay que pasar inadvertido y evitar molestar, las mujeres es recomendable que lleven faldas largas. Da la sensación que uno entra en un gueto de antes de la Segunda Guerra Mundial, hombres con poblada barba con vestido y sombrero negro y camisa blanca, y las mujeres con largas faldas y muchas con la cabeza cubierta por un pañuelo, es como volver al pasado.

Para almorzar o cenar recomiendo por la zona del Centro el Restaurante Azura por su hummus y por la sopa kuba, el Little Jerusalén, o el Mahane Yehuda son otra buena opción.

En la Ciudad Vieja sugiero el Versavee (cerca de la Puerta de Jaffa), el Abu Shukri o el Amigo Emil todo un clásico.

Desde Jerusalén tomaremos un taxi o transporte público hasta el aeropuerto internacional Ben Gurion (Tel Aviv)  

Viaje realizado en agosto 2013

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